2012 |
Yo, Penny Lane Bloom, juro solemnemente no volver a salir con ningún chico en lo que me queda de vida.
De acuerdo, quizá cambie de opinión dentro de unos diez años, cuando ya no viva en Parkview, Illinois (EE.UU), ni asista al instituto McKinley; pero, por el momento, he acabado con los chicos.
Son unos mentirosos y unos estafadores. La escoria de la Tierra. Sí, desde el primero hasta el último.
La maldad personificada. Algunos parecen agradables, claro; pero en cuanto consiguen lo que buscan, se deshacen de ti y pasan al objetivo siguiente.
Así que he terminado.
No más chicos.
Punto final.
2015 |
¿Es incompatible tener novio y a la vez seguir con el club más increíble del mundo? ¿O Penny Lane tendrá que sacrificar algo, quizá lo que más le importa?
Cuando Penny Lane creó el Club de los Corazones Solitarios, no podía imaginar que iba a convertirse en algo tan grande, con más de treinta socias que la apoyarían en todo lo que hiciera... Lo que tampoco imaginaba es que iba a encontrar al mejor chico del mundo: inteligente, cariñoso, comprensivo...
Yo, Penny Lane Bloom, estoy saliendo con alguien. Exacto. La chica que fundó el Club de los Corazones Solitarios y que juró no volver a salir con chicos durante el resto de su vida ahora tiene novio.
Y no, no me he vuelto loca. Ahora tengo el novio que merezco. Es amable, inteligente y divertido. ¡Ah! Se me olvidaba comentar que es un forro.
Aunque, claro, siempre hay un pero... Para nada quiero convertirme en una chica de ésas. Ya sabes a cuáles me refiero: esas que dejan tiradas a sus amigas en el instante mismo que empiezan a andar con alguien. He hecho un juramento: jamás seré así. No puede ser tan difícil
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